El sector de los neumáticos se ha enfrentado históricamente a una intensa competencia, un crecimiento gradual y márgenes estrechos. En los últimos años, el valor total del mercado ha permanecido alrededor de los 50.000 millones de dólares, con un aumento anual global aproximado del 2%, según datos proporcionados por la consultora AlixPartners.
Sin embargo, la aparición de vehículos eléctricos está generando un conjunto completamente nuevo de oportunidades en el sector.
Más rápido y caro
Además de las diferencias notables en cuanto a emisiones y ruido, hay dos características que sobresalen especialmente la primera vez que alguien conduce un vehículo eléctrico:
- Mayor peso: Esto se debe principalmente a la batería, encargada de almacenar la energía necesaria para el funcionamiento del motor y otros componentes.
- Entrega de todo el par motor de manera instantánea: Esta característica se traduce en una respuesta más rápida y eficaz al acelerar, ya que el motor eléctrico proporciona todo su torque de inmediato.
De esta manera, debido a su mayor peso y rápida aceleración, los vehículos eléctricos tienden a desgastar los neumáticos aproximadamente un 20% más rápido que los vehículos de combustión interna, lo que representa un incremento significativo en la demanda de neumáticos. Además, los neumáticos para vehículos eléctricos suelen tener un costo aproximadamente un 50% más elevado, lo que contribuye a un aumento potencial en los ingresos para los fabricantes de neumáticos.
Menos ruidoso
Según la normativa europea, los vehículos eléctricos deben emitir un sonido artificial cuando circulan a velocidades inferiores a 20 km/h. Esta medida tiene como objetivo aumentar la seguridad de los peatones, ya que la falta de ruido de estos vehículos podría tomar desprevenidos a los transeúntes, aumentando el riesgo de atropellos.
Una de las ventajas destacadas de los vehículos eléctricos es su contribución a la reducción de la contaminación acústica. Este beneficio también debería extenderse a los neumáticos que utilizan. Un indicador relevante en la clasificación de los neumáticos es su nivel de rumorosidad, medido en decibelios (dB). Se considera que un neumático tiene un nivel bajo de rumorosidad cuando su emisión de ruido se sitúa por debajo de los 65 dB.
Hasta 15% más de autonomía
Asimismo, mejorar la autonomía de los vehículos eléctricos sigue siendo una prioridad. Según investigaciones realizadas por Michelin, la elección adecuada de neumáticos puede tener un impacto significativo en la autonomía de un vehículo eléctrico, con variaciones que oscilan entre un 10% y un 15%. Estos aspectos técnicos subrayan la importancia de la innovación continua en el diseño y la fabricación de neumáticos para adaptarse a las demandas específicas de los vehículos eléctricos.
Dos ejemplos destacados son las líneas de neumáticos Pilot Sport y e.Primacy, reconocidas por su eficiencia energética sobresaliente. Estas opciones no solo cumplen con los requisitos de resistencia y durabilidad necesarios para los vehículos eléctricos, sino que también contribuyen significativamente a mitigar la autonomía. Los neumáticos Pilot Sport pueden aumentar la autonomía oficial de los coches eléctricos hasta un 7%, mientras que los e.Primacy pueden permitir que un vehículo eléctrico recorra hasta un 10% más de kilómetros por cada recarga en comparación con otros neumáticos.
La capacidad de las empresas de neumáticos para destacarse como innovadoras en estas áreas podría tener un impacto significativo en la fidelidad de los clientes y en la demanda de sus productos. La diferenciación en términos de innovación podría influir en la frecuencia con la que los clientes solicitan sus productos por nombre. Según estimaciones de Northcoast Research, actualmente solo alrededor de la mitad de los compradores lo hacen. Por lo tanto, existe una clara oportunidad para las empresas de neumáticos que puedan destacarse en innovación para mejorar su posicionamiento en el mercado y ganar una mayor participación de clientes fieles.