José Carlos Lazo fue uno de los grandes protagonistas del triunfo del Espanyol en Eibar. El andaluz, que desde su llegada al club en verano de 2022 está teniendo muy poco protagonismo en el equipo, afrontaba este curso con la firme voluntad de superarse y ser importante para el equipo aprovechando su experiencia en Segunda, donde ya logró 27 goles y 13 asistencias en cuatro cursos, uno en el Lugo y los otros tres, en el Almería. Sin embargo, tras un inicio esperanzador, el extremo de Sanlúcar de Barrameda desapareció del verde durante un largo periodo del tiempo, en buena parte por una molesta lesión. En Ipurúa, en un momento clave del encuentro, Luis Miguel Ramis le dio entrada en lugar de Omar El Hilali, y su entrada fue providencial ya que anotó el gol del triunfo, aprovechando con acierto una asistencia de Gastón Valles. Una alegría merecida para un futbolista que ha seguido trabajando en silencio a la espera de su momento, muy penalizado por haber formado parte de la operación que llevó a Embarba al Almería y a su vez lo trajo a Barcelona.
El extremo del Espanyol José Carlos Lazo, muy claro: “Nadie va atirar la toalla”
Hoy los medios oficiales del Espanyol han distribuido las declaraciones de José Carlos Lazo tras ese partido y ese gol por el cual ha entrado ya en la historia del club y del fútbol nacional, ya que nunca había habido una remontada para ganar tan tardía. “Estoy con el subidón aún un poco arriba, pero muy contento y muy feliz. No he pasado un buen momento, la lesión no era muy grave pero me ha tenido apartado varios meses porque era complicado, me ha tenido apartado varios meses porque era complicado tirar a puerta o hacer un centro, no me permitía ciertos movimientos. Quería jugar y meterme en convocatorias y la verdad no me dejaba”. Pese a ello, no se ha rendido: “Nadie va a tirar la toalla, ningún jugador, ni el que está lesionado ni el que no entra en convocatorias, este club es muy grande y este equipo está unido no, lo siguiente, para lograr el objetivo. Todos hemos de ir en el mismo barco, ya se dijo el primer día y hemos de ir en la misma dirección, si perdemos lo hacemos todos y si ganamos también, se vio en Eibar, todos abrazándonos como si fuera una final. Fue un partido muy importante, ganar fuera de casa sin tiempo de hacerlo lo es; el equipo está unido, es una familia y vamos a seguir adelante”. Lo cierto es que las imágenes tras el triunfo en Ipurúa fueron muy emotivas: “Es una alegría emocionante, se logró ganar fuera y en los minutos que fuera, hay que luchar hasta el final porque en dos minutos te cambia el partido, la vida. Vienes con otra mentalidad diferente, nos ha dado un plus para jugar contra el Huesca. Se juegan también lo suyo, es difícil ganar un partido y marcar tres goles como en Eibar. Tenemos que hacer un buen partido para superarlos”. De todos modos, José Carlos Lazo avisa, “queda muchísimo, un partido te sale mal y parece que estás hundido pero el fútbol te da la semana siguiente una nueva oportunidad para estar arriba. Queda una barbaridad. Si te despistas un poco sales del playoff, la competencia entre los 10 primeros es brutal, es la primera vez en Segunda que veo todo tan apretado arriba”.