A menos de un mes para que comience la competición, hay muchas dudas respecto a la composición final de la plantilla del Espanyol, y en especial sobre si formará parte de ella o no su jugador franquicia, Sergi Darder. Este fin de semana han aparecido muchas noticias al respecto de su futuro, desde que el jugador estaría dispuesto a rebajarse el sueldo para facilitar su incorporación al Real Mallorca, a los cantos de sirena provenientes de Ses Illes para repatriarlo al hecho que la SS Lazio lo ha incluido como una de las opciones para reforzar su centro del campo.
Darder, entre los cantos de sirena desde Mallorca y el posible interés de la Lazio; el Espanyol, mientras, lo tiene muy claro
Sobre la primera información, parece muy complicado que Darder se rebaje la ficha para ir al Mallorca, ya que el jugador es sabedor que si se queda en el Espanyol y asciende recuperará ese 50% que queda en suspenso por el descenso; mucho le ha costado al futbolista alcanzar el estatus del que dispone actualmente como para renunciar a él. Por lo que respecta a las palabras de Abdón Prats, de Artà como el capitán perico, de que trata de convencer a Darder para que vaya al Mallorca, se puede hacer una lectura paralela: cuando un futbolista, un actor sin peso en las operaciones de mercado, habla de una posible operación es más un canto dirigido a la galería que no el reflejo de que haya algo serio en marcha. Y por lo que hace a las informaciones provenientes de Italia sobre la inclusión de Darder en la lista de candidatos de la Lazio a reforzar su centro del campo en sustitución de Milinkovic-Savic junto a Sucic (Salzburgo), Veerman (PSV) y Wieffer (Feyenoord) en sustitución del polaco Piotr Zielinski, al menos en el caso de los biancocelestes se trata de una entidad con capacidad para afrontar los parámetros económicos de la operación y le puede ofrecer un proyecto deportivo atractivo -disputarán la próxima edición de la Champions League-. En cualquier caso, estos u otros clubes interesados saben que la única vía para hacerse con sus servicios pasa por pagar al Espanyol los 10 millones de euros de su cláusula, cantidad que en sólo dos semanas sube hasta los 15.
