El nombre de José Salinas ha saltado al primer plano de la actualidad blanquiazul. El Espanyol apura las horas antes de recibir al Villarreal (sábado, 21:00h, RCDE Stadium) con una incógnita que todavía no se ha despejado al 100%: ¿jugarán Carlos Romero y Ramon Terrats ante su club de origen? A día de hoy, no hay confirmación oficial por parte del club perico, pero todo apunta a que el club no tiene fácil asumir las cláusulas del miedo impuestas por el conjunto amarillo.
El Periódico del Mediterráneo desveló que el Villarreal exige 125.000 euros por permitir jugar a Romero y 250.000 euros por Terrats. En total, 375.000 euros si ambos fueran alineados en el mismo partido. Cantidades que se antojan muy difíciles de justificar, aunque la decisión final sigue pendiente de confirmación.
Un peaje demasiado alto
Las cifras que impone el Villarreal son, literalmente, prohibitivas. Y más si se tiene en cuenta que el curso pasado, cuando Romero también estaba cedido, el Espanyol pagó apenas 30.000 euros para liberarlo en La Cerámica. Este año, los importes se han multiplicado, una diferencia que ha sorprendido a todos.
Desde el entorno perico se reconoce que la operación es complicada de sostener, pero tampoco se puede descartar del todo hasta que sea algo oficial. La dirección deportiva, con Unai Ezkurra y Ander Garitano al frente mientras Fran Garagarza se recupera de su reciente problema de salud, deberá valorar junto a Manolo González si el gasto merece la pena en un partido de tanta exigencia.
Manolo González, ante un rompecabezas en la banda izquierda
De confirmarse que no se activarán las cláusulas, Carlos Romero, uno de los fijos en la defensa perica, sería baja segura ante el Villarreal. En ese caso, el técnico gallego deberá decidir si apuesta por un cambio táctico -con tres centrales y Cabrera en el costado- o si confía en José Salinas como lateral zurdo titular.
El partido de este sábado sería, sin duda, una gran oportunidad para Salinas, que hasta ahora ha tenido un papel muy secundario. En Liga apenas suma cuarenta minutos repartidos en varias jornadas -2 ante el Atlético, 9 ante la Real Sociedad, 8 ante el Valencia, 3 ante el Oviedo y 15 ante su ex equipo, el Elche- y solo ha sido titular una vez: en la Copa del Rey ante el Atlètic Lleida, donde completó los 90 minutos y estuvo correcto en labore sdefensivas. Si se confirma la baja de Romero, el de Callosa de Segura podría tener por fin la ocasión de demostrar que puede competir por un sitio real en el once.
José Salinas, un lateral de recorrido que busca su sitio
A sus 25 años recién cumplidos, José Salinas llegó al Espanyol procedente del Elche CF como agente libre y firmó por tres temporadas. Zurdo, rápido y con buena capacidad de ida y vuelta, es un jugador con perfil ofensivo, acostumbrado a incorporarse desde segunda línea y con buen golpeo desde media distancia. En el Mirandés fue una de las revelaciones de la temporada 2022-23 en Segunda división, y en el Elche participó en 39 partidos de Liga la pasada temporada -38 como titular- y anotó dos goles convirtiéndose en uno de los jugadores más destacados del conjunto ilicitano que lograba el ascenso a Primera división.
El estilo más directo y vertical de Manolo González encaja bien con sus características. El entrenador aprecia su intensidad y su velocidad para recuperar posición, aunque le pide más regularidad y contundencia defensiva. Este partido puede ser el examen que estaba esperando
Un Villarreal tocado y un Espanyol que busca redención
En lo deportivo, el Espanyol encara el encuentro con la necesidad de reencontrarse con la victoria tras la derrota en Vitoria frente al Alavés. Y aunque el Villarreal llega tocado después de su tropiezo en Champions ante el modesto Pafos, sigue siendo uno de los equipos más peligrosos de la Liga. La posible ausencia de los dos cedidos, en especial de Romero, complicaría aún más el panorama. Pero el equipo de Manolo González ya ha demostrado que sabe competir incluso en situaciones adversas.
La oportunidad de Salinas
Como decimos nadie en el club ha querido confirmar si el Espanyol pagará o no las cláusulas del miedo, y lo más probable es que la incógnita se resuelva en las horas previas al partido. Lo único seguro es que, se paguen o no, el Villarreal ha puesto un precio demasiado alto a sus cesiones, y eso ha encendido el debate.
Mientras tanto, José Salinas espera su oportunidad. Y en un club como el Espanyol de Manolo González, donde la meritocracia se ha convertido en norma, sabe que un buen partido ante el Villarreal podría cambiarle el curso de la temporada.