El ex jugador del Espanyol Raúl Baena tuvo un paso muy difícil por las filas del FC Barcelona. El andaluz abandonó el Barcelona a finales de la temporada 2007-08 para fichar por el conjunto perico, que a través del jugador pagó a la entidad azulgrana 30.000 euros de indemnización. Sin embargo, el Barcelona reclamó una indemnización de 3,5 millones de euros por extinción anticipada del contrato que unía a ambas partes, después de que el Tribunal Supremo declarara nulo el mismo, aunque la justicia dio la razón finalmente al andaluz. Una batalla judicial entre Baena y el Barça que vuelve a ser noticia a raíz de unas imágenes en que se ve al ahora futbolista del Sabadell durante el partido de los arlequinados contra el Barça Atlètic saltando del banquillo para encararse con el árbitro, Monterubio Torres, y para insultar a los futbolistas del filial azulgrana. Como decíamos esta mañana, unas imágenes ante las cuales los medios no perdían la oportunidad de remarcar de manera bastante interesada el pasado perico de Baena.
Este lunes Raúl Baena se ha explicado después de esta polémica en el programa de ‘SER Catalunya’ ‘Què t’hi jugues!’, tras que el CE Sabadell publicase un comunicado en que se apoyaba al jugador y se posiciona en su favor. El club atribuyó su reacción al hecho que él no había tirado una botella desde el banquillo (motivo por el cual fue expulsado): «Justo cuando me estoy poniendo las espinilleras para salir a calentar, sin ningún motivo, el árbitro viene y me expulsa». Acto seguido, Baena se dirige a sus compañeros de una forma muy vehemente; el ex perico admite que el término que utiliza en el video («reventadlos») no es adecuado: «Se me ponen las revoluciones a dos mil y cuando marcho, me dirijo a mis compañeros y digo una palabra que no es la adecuada. En su momento dije que no era una palabra correcta, pero que estaba en términos futbolísticos y de competición. Yo simplemente quería transmitir carácter; que la gente continúas luchando, en sentido futbolístico; porque estamos en una situación ‘jodida’ de resultados. Lo que quería es que la gente se rebelara ante la injusticia de la expulsión y el resultado». Víctima en los últimos días de muchos mensajes de odio, Baena que un video sin contexto haya provocado esta reacción: «Estamos intentando que no haya violencia, que no haya odio. Al final, si no se contextualiza, es posible que mucha gente canalice este odio hacia mi persona».