Con 17 puntos en su haber, el Espanyol de Luis García se sitúa en el segundo puesto de la tabla de la Liga Hypermotion al término de la octava fecha del torneo. El equipo blanquiazul, que viene de enfrentarse al Racing de Ferrol, está a solo un punto del Leganés, que lidera la clasificación. Es cierto que el camino de los pericos se vio allanado por la expulsión de Moi Delgado, tan justa como fruto de una acción involuntaria, pero deja una serie de derivadas que abonan el optimismo: la reivindicación de Fernando Pacheco con una magnífica parada que le sirvió para hacerse perdonar la pifia ante el Tenerife, el gran partido de Keidi Bare, el volver a ver feliz a Martin Braithwaite, y también poder ver evolucionar sobre la hierba a hombres como Álvaro Aguado y José Gragera, el primero dejando muy buenas sensaciones en los minutos de los que disfrutó, y el segundo pudiendo disfrutar de unos minutos muy necesarios a nivel mental para el asturiano. Casi todo fue positivo, a pesar de que la puesta en escena no fue la de otros encuentros, pero lo realmente importante es que se lograron tres puntos clave para volver a ocupar zona de ascenso directo y acercarse a un liderato que a día de hoy ostenta el renacido Leganés con tan solo un punto más que los blanquiazules. El Espanyol ciertamente se vistió ante el Racing de Ferrol con el traje de la efectividad, como hemos analizado en ‘La Grada Ràdio’, y ahora aspira a conseguir el 9 de nueve en una semana que puede ser clave. Los dos próximos partidos son a domicilio, el jueves ante el colista FC Cartagena y el lunes frente a un filial, el Villarreal B. El líder, el Leganés, por su parte, juega mañana en el campo del Burgos y el sábado recibe al Real Oviedo. Posteriormente jugarán también en casa con la SD Amorebieta y después llegará un duelo que puede ser por todo lo alto ante el mismo Espanyol. Está por ver qué equipo llega líder a esta fecha.
El análisis de Pedro Nieto
Pedro Nieto, uno de los encargados de la retransmisión del partido para las televisiones, ha analizado en nuestro programa un encuentro que cree estuvo igualado hasta la expulsión, y que dejó buenas sensaciones aunque a su parecer “me deja dudas en ataque, porque creo que se saturó mucho por dentro. Es algo que puede solucionarse aunque el Espanyol puede tener problemas en las bandas si quiere jugar con extremos. Vi un buen tono defensivo, fue un buen partido, y se debe aprender de encuentros como éste con situaciones complicadas al inicio porque pueden repetirse en próximas jornadas”. Nico Melamed no tuvo su día; algunos consideran que piensa más en la renovación que en el juego, pese a sus intentos explicados este lunes en ‘La Grada Ràdio’ de que el club volviese a hacer una oferta, recibidos de momento con una negativa por parte de la entidad. “A veces nos olvidamos que jugamos contra otro equipo y el Racing de Ferrol hizo muchas cosas bien. Nico Melamed ha de ser un jugador diferencial, el resto de jugadores han de asociarse con él. No se puede rendir siempre al 100%, es un momento puntual, en lo que llevamos de temporada ha sido un futbolista diferencial”. Quien brilló sobre el resto fue Martin Braithwaite, que por cierto ha quedado fuera de la convocatoria de su selección, Dinamarca, para los próximos compromisos internacionales: “Peor situación que la vivida a principio de temporada no la tendrá, sabía que estando en Segunda podía pasarle porque es un mensaje que se le enviaba. Pero es un jugador diferencial, es un profesional y lo demostró ayer”.
El caso Luis García, y el poco crédito por parte del entorno del Espanyol
Pese a que por fin el Espanyol tiene un sistema de juego definido tras muchos años, los analistas no acaban de estar convencidos del modelo de Luis García: “Esperamos mucho del Espanyol, Luis García conoce mejor que nosotros lo que se cuece dentro y tiene un gran arsenal de futbolistas. Pero veo al equipo parado, con pocas ideas, con pocos partidos en que se haya impuesto al rival de manera más completa, acabando jugadas y no tirando tanto de las individualidades, porque está viviendo de eso más que de lo colectivo. Bien atrás, peor delante, falta colectividad arriba, saber como atacar las fases más débiles del equipo contrario”. El cuestionamiento de parte de la afición y de toda una serie de analistas ha sido también el tema central de la tertulia del espacio; “Luis García está pagando todo lo que ha pasado estos años, porque la gente no aguanta nada aunque el entrenador fuese un híbrido de todas las esencias pericas; el día que haya dos resultados seguidos y el club le eche vendrá otro entrenador y seguiremos igual, se llame como se llame. Pasará con cualquiera que venga”, se lamentaba amargamente Quique Iglesias. Nuestro director Francesc Via añadía elementos al debate: “El espanyolismo tiene ciertos componentes propios de aficiones poco acostumbradas a ganar, pero hay gente que piensa que determinadas maneras de jugar no tienen nada que ver con la esencia del Espanyol, algo que si sustenta en la famosa frase ‘si hubiese venido Bordalás nos salvábamos, y vino Luis y bajamos’. No se quiere un equipo que juegue, se cree que un fútbol feo o resultadista lleva antes a los resultados que la propuesta que intenta implementar Luis García”.