Luis García, entrenador del Espanyol, ha sido entrevistado en ‘El Larguero’ este lunes 16 de octubre. El técnico ha calificado como «bueno» el inicio de temporada de su equipo, que es líder de LaLiga Hypermotion. Además, asegura que «tenemos sensaciones positivas porque estamos avanzando en la idea que queremos crear». Sin embargo, destaca que «la liga es muy larga y tenemos que ir con pies de plomo, aunque haya mucha gente que nos da como favoritos».
Según Luis García, el mérito de que su equipo se sitúe en primera posición es del compromiso de sus jugadores: «La pretemporada fue complicada y hubo altibajos porque futbolistas importantes decidieron marcharse. En cambio, todos aquellos que han seguido se han puesto el mono de trabajo y, aunque muchos de ellos son jugadores de Primera, han entendido que se nos complicarán las cosas si no atacamos y defendemos todos».
Vuelve a elogiar a Fernando Pacheco
El entrenador del Espanyol también ha sido preguntado por el gesto que tuvo después del partido contra el Real Valladolid, cuando fue corriendo a abrazar a Fernando Pacheco, que había conseguido dejar la portería a cero después de haber cometido algunos fallos en los encuentros anteriores. El técnico perico define al meta como «un jugador que necesitamos en la salida de balón. Tuvo un pequeño error en Tenerife, pero siempre lo he defendido. Los fallos forman parte del juego y los futbolistas no son robots. Tenemos un portero extraordinario que se merecía un partido como el otro día».
Por último, los presentadores de ‘El Larguero’ han recordado la frase más famosa de Luis García: «Lo mejor de Barcelona es ser del Espanyol«. El asturiano asegura que sigue pensando lo mismo que cuando pronunció esta afirmación en aquella famosa rueda de prensa de 2011: «No hay nada mejor que ser perico y la forma en que siente el club nuestra gente. Da igual los horarios que nos pongan que siempre vienen a animarnos». Manu Carreño, presentador del programa, ha preguntado a Luis García si esa frase le descarta para dirigir al FC Barcelona y el míster perico tiene claro que «es totalmente imposible que entrene al Barça porque mi corazón y mi sangre son blanquiazules».