En su comparecencia ante los medios de ayer, el director deportivo del Espanyol, Fran Garagarza, dejó varios titulares de peso, pero si algo quedó claro es que parte de su discurso estuvo orientado a reforzar la unidad del equipo y a poner en valor a varios nombres que en ocasiones han estado cuestionados pero que él considera clave dentro del vestuario. Además de insistir en la importancia de retener a jugadores como Javi Puado y Alex Král, ya que reveló que se está trabajando en la renovación del primero y en la continuidad más allá de su cesión en este curso por lo que respecta al segundo, Garagarza realizó una defensa explícita de la figura de Manolo González, una reivindicación que muchos venían reclamando desde hace tiempo, y ensalzó a futbolistas que atraviesan una situación difícil como Pere Milla y Álvaro Aguado.
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— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) February 4, 2025
Garagarza, contundente con la figura del técnico del Espanyol Manolo González
Sobre el técnico del Espanyol, Garagarza fue especialmente contundente: “Tenemos el entrenador que queremos, es nuestro entrenador y el modelo de entrenador que queremos, modelo cantera, un buen gestor, no tenemos un entrenador mejor que Manolo, 100 %”. Con estas palabras, el director deportivo aparentemente despejó cualquier rastro de dudas que pudiese existir sobre la confianza que hay en el club hacia el preparador, blanco de la crítica en determinados momentos de la temporada. Esta reafirmación pública de respaldo a un técnico parece una señal inequívoca de estabilidad en el proyecto, aunque hay precedentes como el acaecido en su día con Luis Miguel Ramis, que parecía ratificado poco antes de su fulminante despido, que invitan a poner en cuarentena el tema.
Palabras de apoyo a para Aguado y Pere Milla
Pero Garagarza no solo centró su discurso en el entrenador. También quiso destacar la actitud y el compromiso de jugadores con un rol secundario en la plantilla, como Pere Milla y Álvaro Aguado. Ambos futbolistas no han contado con demasiados minutos bajo la dirección de Manolo, pero la intención del club es clara: recuperarlos para la causa. “No han salido porque entendemos que necesitamos una plantilla amplia, de 25 jugadores, y no han pedido salir, lo que era un ítem importante para nosotros. Están haciendo entrenamientos de nivel muy alto, la profesionalidad de ambos es de una nota alta y el grupo en su totalidad, los 25, son muy importantes. Aguado es el que más celebró la victoria ante el Madrid sin jugar un minuto y para nosotros es importante”, expresó Garagarza.
El mensaje es evidente: más allá de las rotaciones o de los minutos en el campo, el Espanyol quiere contar con todos los efectivos y crear un bloque fuerte, donde cada integrante sea relevante en su papel en lo que queda de temporada. La mención especial a Aguado, un hombre muy criticado por el entorno, destacando su implicación pese a no haber jugado, es un gesto que denota la importancia que el club otorga al compromiso colectivo.
Este respaldo público no es menor. En un equipo donde la competencia es alta y las oportunidades escasas para algunos jugadores como los dos citados, saber que desde la dirección deportiva se valora su profesionalidad puede ser un aliciente para seguir trabajando y esperando su momento. Si hacemos caso a estas palabras de Garagarza, en este Espanyol, cada pieza cuenta y el éxito no sólo se mide en minutos disputados, sino también en el compromiso con el grupo y en su comportamiento de puertas adentro.
