La Fundació RCDE ha sorprendido a propios y extraños al lanzar un comunicado donde critica la gestión del presidente del Espanyol, Chen Yansheng, y también de los directivos del club blanquiazul. Además, esta entidad exige y propone una serie de cambios en la entidad, ya que considera que se encuentra “en una deriva”.
En primer lugar, la Fundació RCDE se muestra tajante al afirmar que “la evaluación de los resultados deportivos recientes, con dos descensos en cuatro años, y los resultados decepcionantes de las diferentes categorías, nos hace considerar que es crucial tener un proyecto deportivo, serio, profesional, sólido y claro que nos lleve hasta resultados positivos, dado que es evidente que ha sido un fracaso hasta ahora”.
Seguidamente, el comunicado pide responsabilidades y soluciones a Chen Yansheng, máximo accionista del Espanyol: ”El modelo de gestión implantado por la propiedad, sin duda bien intencionado, ha sido errático y tiene que servir para una profunda reflexión por parte de los actuales responsables para un reconocimiento de los fallos cometidos y para incrementar medidas para revertir la deriva en la que estamos inmersos”.
«Hay que sustituir a los actuales gestores»
Para la Fundació RCDE, una de las determinaciones que debe tomar el presidente del Espanyol son cambios en los directivos del club, una afirmación que parece apuntar directamente a Mao Ye, CEO de la entidad: “Hay que sustituir a los actuales gestores por profesionales con experiencia en el mundo del fútbol, en general, y del RCDE, en particular, con el objetivo de optimizar la gestión en las diferentes áreas”.
Más allá del ámbito deportivo, la Fundació también se siente preocupada por otros aspectos. Esta organización considera que “el Espanyol debe recuperar la presencia e influencia en las instancias deportivas, federativas, arbitrales, mediáticas e institucionales”. Además, el mismo organismo recuerda que “los dos descensos en cuatro años tienen un enorme perjuicio colateral en la desafección social”. Por tanto, la Fundació RCDE manifiesta que “desde la propiedad hasta los gestores y ejecutivos, deben tener mayor sensibilidad y conciencia de la importancia de la masa social, que desea y merece ser escuchada y que nunca opinará ni actuará con otro objetivo que no sea ayudar”.
Por último, el comunicado propone al Espanyol la creación de una Asamblea de socios compromisarios con el fin de dar más voz a los aficionados y que aporte los siguientes efectos: “Acercar el club al socio, generar ideas y trasladar inquietudes al Consejo de Administración y sensibilizar a la directiva con las decisiones de la Asamblea, aunque no sean vinculantes”.