Pese a que su balsámico triunfo ante el Valladolid permite al Espanyol dormir al menos el viernes fuera de la zona de descenso, el conjunto blanquiazul sigue caminando por la cuerda floja tras finalizar un tramo crucial de la temporada, en el que se enfrentó a rivales directos por la permanencia en LaLiga EA Sports. Tras la derrota en el derbi frente al FC Barcelona que lo dejó al borde del abismo, con solo 10 puntos y en la posición 17, el conjunto blanquiazul encaraba una serie de partidos considerados vitales para enderezar su rumbo. Ahora, tras cerrar esta fase, el balance es de 9 puntos sobre 24 posibles, un botín que genera más dudas que certezas.
Manolo González, consciente de la situación y también de la urgencia del momento, había dejado claro tras la caída en Montjuïc que no había tiempo para excusas. La permanencia pasaba por sumar puntos en esta «otra» Liga , donde la competitividad y la lucha contra los rivales directos serían decisivas. Pese a las buenas señales vistas en la segunda mitad del derbi, donde el equipo mostró garra y compromiso, los resultados en este caladero de puntos han quedado por debajo de lo que los cálculos hacían deseable. El Espanyol logró derrotar a Celta y Valladolid para sumar 6 puntos importantes, y además sumó tres empates, ante Osasuna, Valencia y Leganés. Sin embargo, las tres derrotas ante Girona, Getafe y Las Palmas les mantienen en una situación delicada.
Haber cerrado esta etapa de la campaña con 9 puntos sobre 24 no es un desastre total, pero está lejos de ser el impulso necesario para encarar un calendario que ahora se endurece.
Una nueva fase de máxima exigencia
Con el cierre de esta etapa, el Espanyol entra en un período aún más complicado. En las próximas jornadas, tendrás que visitar al Sevilla en el Sánchez Pizjuán y enfrentarte nuevamente al Real Madrid, dos pruebas de altísima exigencia que podrían marcar un punto de inflexión en la temporada. Esta fase del calendario, que se prolongará prácticamente hasta abril, enfrentará a los blanquiazules ante rivales de mayor calibre, donde cada punto será vital para no quedar hundidos en la clasificación. La pregunta del millón sería si, con los 9 puntos ante equipos de «su Liga», conseguidos hasta el momento, es suficiente o si tendrá que ganar mucho más para seguir manteniendo la esperanza de la permanencia. El futuro de este club en LaLiga está realmente en el aire, y sólo los resultados pueden determinar si esto es así.
Manolo González sobrevive a una fase crítica, entre aplausos y algunas dudas
Durante esta fase del calendario, Manolo González, el auténtico capitán del barco blanquiazul, ha sorteado momentos críticos para mantener al equipo a flote. El RCDE Stadium vivió ante el Valladolid una noche de emociones encontradas. El «Manolo, Manolo» resonó con fuerza desde la grada, un claro respaldo de un sector de la afición; sin embargo, también se escucharon algunos silbidos, reflejo de que su figura empieza a dividir opiniones.
El técnico, que fue aclamado en jornadas anteriores por revitalizar al equipo, parece haber perdido parte de la unanimidad que lo rodeaba. Este triunfo, aunque vital, deja en el aire el desafío más grande para Manolo González: no solo sobrevivir en la tabla, sino también recuperar la confianza total de la afición perica.