La derrota del RCD Espanyol ante el CD Leganés, la primera de la temporada en casa, además de suponer la pérdida del liderato que hasta ese momento ostentaban los de Luis García trajo consigo una enorme decepción para la afición blanquiazul, que acabó despidiendo a los suyos con una pitada. El propio técnico perico tras el encuentro admitía que había muchas cosas a corregir para seguir en la zona alta de la tabla aunque recordaba, siguiendo el mismo discurso adoptado por Javi Puado, Jofre Carreras y José Gragera ante los medios que la Liga Hypermotion es muy larga y que perder un partido no era, palabras pronunciadas por el citado pichichi perico, “el fin del mundo”.
El análisis de la derrota del Espanyol ante el CD Leganés, con lección táctica de Borja Jiménez y de nuevo, errores individuales
Un acertado diagnóstico de las causas de la derrota del Espanyol ante el CD Leganés lo hacía en su cuenta de Twitter nuestro analista en ‘La Grada Ràdio’ Àlex Cobas: lo primero a destacar es el planteamiento de Borja Jiménez, técnico del Leganés, que con su dibujo 5-4-1 cerró los espacios interiores al Espanyol. Conocedores de que los pericos progresan más por el pase que por la conducción, encimaron a los receptores y liberaron a los pasadores. El mismo Luis García reconocía en sala de prensa las dificultades que habían tenido para llegar con claridad ante un 5-4-1 “tan bajo”. Ante un sistema defensivo muy sólido y estático, el Espanyol no buscó soluciones alternativas como conducir y fijar por dentro y abusó del recurso aparentemente fácil, jugar por fuera ante un rival que defiende bien por el interior, sin tener en cuenta que tenía poca amenaza por fuera, sin laterales que pudiesen ayudar en tareas defensivas ni extremos. No fue hasta la entrada de Jofre, el único que pareció entender las necesidades del partido, que se abrió algo el campo; ¿por qué no ingresó antes al terreno de juego?, aún se preguntan muchos. Además de no saber abrir una defensa tan cerrada, esa telaraña tendida por los de Borja Jiménez, el equipo se quedó a medio camino entre ir a apretar arriba y replegarse atrás, lo que deja dudas de cuál era realmente la estrategia para intentar superar a los pepineros. Además, la transición defensiva volvió a generar problemas; el Leganés supo provocar errores que eran evitables como los pases de Keidi Bare en la amarilla a Calero o Gragera en el gol, agraviado por un nuevo error individual de Fernando Calero en la acción que a la postre decidiría el enfrentamiento.
El Leganés sorprendió al Espanyol en su visita al Stage Front Stadium (0-1). Vamos con un hilo para intentar analizar las causas de la derrota blanquiazul. #rcde
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— Alex Cobas (@AlexCobas29) October 21, 2023
En resumen, un muy buen planteamiento por parte de Borja Jiménez, muy ordenado en defensa y muy sólido, que además supo aprovechar una de sus pocas llegadas a marco contrario para forzar el error rival y llevarse el encuentro.
Luis García, el entrenador del Espanyol, en un momento bajo de popularidad
Tácticamente, cabe destacar también que el partido deja señalado a un hombre, Luis García, el entrenador del Espanyol, en un momento bajo de popularidad tras haber sumado dos derrotas en los últimos tres partidos. Entre las debacles ante Villarreal B y Leganés, el triunfo ante el Real Valladolid también dejó en muchos un regusto extraño, ya que el guion del partido fue algo diferente que en otras victorias, con los blanquiazules aprovechando una de sus mejores virtudes, el poder ofensivo y los goles para colocarse por delante en el marcador por la vía rápida, situando un claro 2-0 en 35 minutos gracias a sus dos referentes arriba, Martin Braithwaite y Javi Puado, para entonces gestionar la diferencia con una propuesta más defensiva, esperando al rival. No acabó de gustar que se fiase al compromiso y esfuerzo en tareas de contención el devenir del encuentro, y no faltaron críticas en el entorno al hecho de que el Espanyol cediese al rival el dominio de la pelota, recordando este hecho a la manera en que Vicente Moreno era puesto en su día en el centro de la diana por la manera en que planteaba sus encuentros, todo ello a pesar de que de esa manera logró de manera muy solvente el ascenso y posteriormente mantuvo al equipo en Primera con holgura. Aunque el Espanyol sigue en plaza de ascenso directo, lo cierto es que el argumento de que la Liga Hypermotion es muy larga no ha de servir de parapeto que justifique el desacierto o la escasez de ideas cuando llegan las derrotas y las sensaciones negativas se acumulan en el entorno. Los partidos ante Villarreal B y Leganés, que han venido acompañados de lecciones tácticas por parte de los entrenadores rivales, han hecho mucho daño, y bien harían Luis y los suyos en despejar dudas de manera inmediata. El equipo juega el sábado día 28 ante el Sporting de Gijón, y parece más urgente que nunca un triunfo solvente y claro para poder volver a mirar al futuro con optimismo y conseguir ese equilibrio que constantemente reclama el técnico perico en sus comparecencias públicas.