La sombra de Diego López es alargada y cubrir el hueco dejado por un portero que ha sido un icono en los últimos seis años no iba a ser tarea fácil. Pero ya desde la pretemporada una buena parte de la afición mira con lupa cada movimiento de su sustituto, Benjamin Lecomte, cuyas actuaciones despiertan no pocos recelos. Sin ir más lejos, en el primer partido de LaLiga contra el Celta, no fueron pocos aficionados los que se quejaron en las redes de su actuación en los dos goles, afirmando que podía haber hecho algo más, cuando no culpabilizándole abiertamente de los mismos, en especial el segundo. Pero desde la dirección deportiva existe una total confianza en el jugador y, de momento, no existe la intención de fichar otro refuerzo en la portería o cuando menos no es ahora mismo una prioridad.
Es sabido que el Espanyol anda a la caza de un extremo, que podrían ser dos si la situación económica lo permite. Asimismo se buscan un central y un delantero, por su Raúl de Tomás abandona finalmente la disciplina blanquiazul. Pero, en principio, el Espanyol no está buscando refuerzo para la portería, si bien sigue atento a las evoluciones de porteros con los que había contactado con anterioridad. Uno de ellos és Álvaro Fernández, todavía en el Huesca pese a ser pretendido por Girona y Real Sociedad. Por otra parte, no son pocas las voces desde el entorno y también desde el propio club que abogan por dar una nueva oportunidad a Joan García, pero parece decidido que en el caso hipotético de que hubiese una nueva incorporación, éste saldría cedido.
En resumen, existe confianza desde el seno del club en que Lecomte pueda demostrar finalmente los motivos que le han hecho merecedor de ocupar la portería blanquiazul saldando los debates sobre la misma. No habrá refuerzos en principio en la portería, pero conociendo el mundo del fútbol y lo que ha sucedido en el pasado en situaciones similares, mientras haya mercado, todo puede pasar…