No está encontrando la regularidad el Espanyol B. Los de Luis Blanco, que empataron la pasada jornada ante la AE Prat y que suman dos puntos de los últimos 12, han sufrido un bajón respecto a la primera vuelta y no se acaban de encontrar en este 2023.
Tras el citado empate contra la AE Prat, la SCR Peña Deportiva amplia su ventaja en la cuarta plaza a los cinco puntos, mientras que la SD Formentera se sitúa tan solo tres puntos por debajo de los blanquiazules. El Espanyol B recibe este próximo domingo 19 de marzo a las 18.30 horas al Atlético Saguntino, duelo para el que volverá a estar disponible el motor del equipo, Dani Villahermosa, tras dos jornadas consecutivas sin estar en la convocatoria por problemas físicos.
Lo cierto es que este Espanyol B poco tiene que ver con el de principio de campaña, fechas en las que llegó a liderar el grupo 3 de Segunda RFEF. Los blanquiazules no han comenzado el 2023 con buen pie y suman 12 puntos de 33 posibles repartidos en dos triunfos, cinco empates y tres derrotas. El filial no gana desde hace cuatro jornadas y solo suma un gol en los últimos tres partidos.
Quitando los dos primeros encuentros de año, en los que el Espanyol B se midió a Terrassa CF (derrota por 3-4) y Lleida Esportiu (empate a uno en el Camp d’Esports), los últimos ocho rivales ya se midieron a los blanquiazules en la primera vuelta, y la diferencia es obvia: en la primera parte de la liga el filial sumó, en las ocho primeras jornadas, 15 puntos de 24 posibles. En esta segunda vuelta, ha logrado diez.
Más flagrante es la diferencia de goles anotados: en las primeras ocho jornadas del campeonato liguero se marcaron 12 dianas y ahora, ante los mismos rivales, solo se ha visto puerta en cinco ocasiones. Las dianas encajadas son las mismas, siete.
Así pues, el Espanyol B tiene claro que la mejora para seguir en la zona alta y escalando posiciones debe ser en ataque: en las 18 primeras jornadas solo se quedó a cero en una ocasión, mientras que ha ocurrido en cuatro en la siete siguientes.