Héctor García no se mordió la lengua en su participación en La opinión del día de La Grada Ràdio. Directo, sin filtro y con el estilo que le caracteriza, dejó claro su inconformismo con el empate ante el Atlético de Madrid, un partido que, según él, el Espanyol dejó escapar por falta de ambición.
“¿Qué tal, amigos y enemigos de La Grada? Sobre todo esos que ponéis comentarios y demostráis que no sabéis escribir y que no debéis estar ni escolarizados”
Así arrancó, fiel a su estilo provocador, antes de meterse en harina. Para él, el empate ante el Atleti es un resultado insuficiente porque el rival “no hizo nada” y porque el Espanyol “salió cagado”. En la segunda parte, con un poco más de iniciativa, se vio que se podía hacer daño, pero el equipo, según él, volvió a pecar de miedo:
“Manolo González pecó otra vez de miedoso. Ya sé que no se puede tocar a vuestro líder Manolo, que es de marca más Hacendado, pero así está la cosa”
El análisis fue aún más crudo cuando entró en la dinámica del equipo fuera de casa.
“Era partido para ganar, sobre todo por una cosa: a priori miras desde fuera y está bien un punto contra el Atlético de Madrid, tampoco contábamos los tres del Madrid, pero éste es el problema, que fuera de casa no sumamos, cuesta horrores”
Y razón en esto al menos no le falta: el Espanyol sigue teniendo un problema serio a domicilio. A excepción de la victoria en Vitoria, el bagaje es preocupante. Y los partidos que vienen no invitan precisamente al optimismo.
“La gente dice, ‘tenemos un partido menos’, pero es que es en Vila-real, y allí lo más normal es perder. Con suerte haces un buen partido y empatas, pero lo normal es perder”
También hubo dardo para Alex Král, uno de los jugadores más señalados por Héctor García; mensaje claro: toca hacer cambios en el centro del campo.
“Lo de Král no se aguanta por ningún sitio: lleva desde noviembre o diciembre que es una sombra de lo que fue, no le recuerdo ningún partido decente. Edu Expósito no me dice nada, es un jugador mediocre, pero cuando entra juega con más sentido y tiene buen golpeo de pelota, cosa que Král no tiene, o es que no se atreve a chutar cuando llega a la frontal”
El futuro inmediato no da para muchas alegrías, pero sí para una certeza: la necesidad de mejorar fuera de casa si el Espanyol quiere alejarse de la zona peligrosa.
“El del Atlético era un partido que necesitábamos ganar, eso es lo que me duele; a ver en Vallecas, un campo difícil, aunque venimos de una mala racha fuera el otro día fuimos capaces de ganar en Vitoria y es un equipo que es perro, cuando ha de jugar bonito lo hace y tiene jugadores resolutivos, cosa que no tenemos nosotros. Así que nada, que Dios nos coja confesados”