Vamos a repasar las cinco claves del inicio de temporada del RCD Espanyol. El equipo de Luis García cierra las diez primeras jornadas de la temporada de la Liga Hypermotion, casi el primer cuarto de temporada, situado en segunda posición de la tabla con 20 puntos a tan solo uno del liderato que ostenta el CD Tenerife; aparentemente, una buena posición cara al objetivo del ascenso, pero que queda absolutamente mediatizada por el durísimo palo recibido en el campo del Villarreal B, donde los nuestros perdieron la noche del lunes por 3-1. Así, pese a seguir en posición de ascenso directo gracias a las seis victorias, dos empates y dos derrotas firmadas hasta el momento, lo cierto es que esta derrota ha erosionado profundamente la confianza del entorno en el proyecto y en la misma figura de Luis García, ya fuertemente criticado desde hace tiempo por un sector de la afición, posiblemente por aparecer en la fotografía del pasado descenso a Segunda. El tramo de partidos que ahora afronta el equipo, con cuatro rivales de enjundia como el Real Valladolid, Leganés, Sporting de Gijón y Eibar, todos en casa a excepción del duelo ante los asturianos que tendrá como escenario El Molinón, es clave para recuperar el buen rumbo y también la confianza de la hinchada. Además, demostrará si se ha aprendido de este tramo de temporada ya disputado esas cinco claves, las cinco enseñanzas que dejan este inicio de curso.
La prudencia, algo más que un simple discurso
Son varios los equipos teóricamente modestos que han plantado cara al conjunto perico, sin ir más lejos un filial como el Villarreal B que directamente pasó por encima de los blanquiazules. Para ser sinceros, el discurso de la prudencia y de que no existe enemigo pequeño es el que han seguido desde el inicio de temporada tanto el vestuario como el cuerpo técnico del Espanyol, y cada comparecencia pública es buen ejemplo de ello del respeto con el que se afronta cada encuentro independientemente del nombre o el historial del rival. Sin embargo, ello no puede quedar en un simple discurso y ha de servir como incentivo para encontrar las armas necesarias para afrontar con garantías los partidos sea cual sea el contendiente.
La importancia de ser el equipo más goleador de la Liga Hypermotion, y la dependencia de los de arriba
Si en algo ha destacado el Espanyol en este primer cuarto de curso es en su capacidad goleadora. Con 20 tantos, el blanquiazul es el conjunto más realizador de la categoría, con 11 en casa y 9 a domicilio. Sin embargo, ha quedado demostrado que demasiadas veces el equipo se apoya en demasía en la efectividad de sus delanteros, y que cuando esta línea no tiene el día se sufre más de lo esperado en un conjunto del teórico potencial del blanquiazul.
La defensa sigue siendo una rémora
Ello nos lleva a la tercera clave: los problemas defensivos del RCD Espanyol. Desde el pasado curso el sistema de contención de blanquiazul es un quebradero de cabeza, y este año con hasta 11 tantos encajados el blanquiazul es el conjunto que más veces ha sido batido entre los de la parte alta de la tabla. La importancia de la puerta a cero se demuestra en que las cuatro veces que se ha materializado ello el triunfo ha caído del lado perico (Racing de Santander, 2-0; Mirandés, 0-1; Racing de Ferrol, 3-0 y Cartagena, 0-2.
Lo de la igualdad máxima en la categoría no es una excusa
Ya a la hora de analizar antes del inicio de la competición los equipos que teóricamente eran candidatos al ascenso se percibía que la categoría iba a estar más igualada que en el año del último ascenso. Pese a que el presupuesto del Espanyol es con diferencia el más alto de la categoría la diferencia no es tan alta respecto al resto como entonces, y son más los conjuntos que opositan a las plazas de ascenso directo y de playoff; buena muestra de ello es que entre el líder y el último equipo que ocupa la última plaza de promoción hay sólo dos puntos de margen, y ningún conjunto ha podido despegarse por lo alto en la tabla.
La intensidad, innegociable; la autocrítica, también
Está quedando claro este curso, y buena prueba de ello son las mencionadas dificultades con las que se está encontrando el equipo con los equipos teóricamente más modestos de la categoría como recién ascendidos y filiales, que la intensidad sobre el verde desde el primer minuto de juego es algo innegociable. En esta Liga Hypermotion las relajaciones se pagan muy caro, como también los experimentos a destiempo como puede considerarse el inexplicable cambio de sistema aplicado el pasado lunes por Luis García ante el Villarreal B. Las palabras del técnico en la rueda de prensa posterior a la debacle en La Cerámica en el sentido de que repitiría la misma estrategia de darse el caso indica que posiblemente por la presión del entorno al menos en público falta ese punto de autocrítica que sin duda a nivel interno sí se habrá hecho.