El Espanyol no se ha querido olvidar de los cien años del estadio de Sarrià, los cuales se cumplen el próximo 23 de febrero. De manera paralela a la iniciativa ‘Memorial Sarrià‘, a la que todavía os podéis adherir, el club ha presentado sus actos para conmemorar dicha fecha en el Ajuntament de Barcelona.
La colocación de unas placas donde se encontraba situado el estadio, hoy en día edificios residenciales con un tímido parque en el centro; la edición de un libro sobre la historia del estadio de Sarrià y diversas banderas por toda Barcelona en recuerdo al estadio, así como una exposición en el ‘Diposit del Rei Martí’ del barrio de Sant Martí, que estará vigente del 1 al 26 de febrero en la que se podrá conocer la historia de un estadio que pese a ya no existir forma parte de la historia del fútbol mundial, los actos.
A la presentación realizada en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi acudieron en representación del Espanyol su CEO, Mao Ye y varios exfutbolistas que jugaron en el estadio de Sarrià. Tamién estuvo presente el presidente de la Fundació Antoni Díaz Teixidó, el concejal de distrito Sarrià-Sant Gervasi Albert Batlle y Alberto Fernández Díaz miembro del comisionado del centenario de Sarrià.
Me apenó mucho la desaparición de Sarria, ¡qué míticas tardes! ¡Qué vida tenían Sarriá y el Club con el estadio erigido en medio de la ciudad! Supongo que la iniciativa tendrá su lógica por la memoria, pero me apena mucho más que un Club en plena deriva deportiva y económica se aferre al pasado como algo importante pero el futuro parece que le importe poco. Sarriá desapareció y varias placas y un libro no nos devolverán lo que perdimos entonces. Sin embargo, hoy en día estamos muy cerca de la irrelevancia total, no sé yo si de la desaparición, y no veo al Club ni a sus dirigentes esforzándose lo más mínimo por asegurar el futuro. Eso sí, celebremos el pasado que nunca volverá.
Con personajes como Fernández Díaz merodeando por el Club, nunca llegaremos a nada.