Si alguien salió reforzado del 1-2 del Espanyol en San Mamés fue Urko González de Zárate. El centrocampista se marcó un partidazo de esosque sostienen victorias grandes. Mucho despliegue, personalidad y cabeza fría en un escenario exigente, y todo ello ante un Athletic que, según se rumorea, no le pierde la pista a su crecimiento. Urko, eso sí, no se salió del guion.
“Vamos partido a partido, con los pies en el suelo”
Lejos de cualquier euforia, el mensaje fue claro y directo. “Al final vamos partido a partido, con la mentalidad de ganar cada uno de ellos”, explicó tras el encuentro. Y enseguida añadió el matiz que define a este Espanyol: “Es verdad que llevamos una muy buena racha, pero tenemos que tener los pies en el suelo”. Cinco victorias seguidas, 33 puntos y Europa en el horizonte, pero sin perder la calma.
Trabajo diario y fe ciega en Manolo González
Urko puso el foco donde más duele y donde más se construyen las rachas. “Al final, la unión que hay dentro del vestuario, el día a día, trabajamos mucho”, contó. Pero no se quedó ahí. También quiso destacar la pizarra y el liderazgo del técnico: “Luego, los planes de partido, lo que nos dice Manolo, lo seguimos a pie de letra y se ven los resultados”. Un mensaje que encaja como un guante con lo que transmite el equipo sobre el césped.
“Así da gusto irse al parón navideño”
San Mamés no es un campo cualquiera, y Urko lo sabe bien. “Todos los campos de Primera división son muy complicados”, recordó. Pero este Espanyol no se arruga: “Lo damos todo y podemos ganar a cualquiera”. Con esa mentalidad, cerrar el año como lo ha hecho el equipo es un premio merecido. “La verdad es que así da gusto irse al parón navideño”, concluyó.
Urko se marchó de Bilbao sin levantar la voz, pero dejando una actuación que habla por sí sola. Y mientras algunos toman nota desde la grada, él sigue a lo suyo: trabajo, humildad y un Espanyol que acaba 2025 creyendo de verdad en lo que hace.