El Espanyol vive un momento dulce, eso está claro. Quinto en la tabla con 30 puntazos, y todavía con tres partidos por jugar antes del ecuador de la temporada, el equipo de Manolo González se ha ganado a pulso el derecho a soñar. Quedan por delante Athletic, Barça y Levante para cerrar una primera vuelta de nota, pero en esa hoja de ruta hay un pequeño gran problema que empieza a asomar: las tarjetas amarillas.
Apercibidos de sanción antes del partido más especial
Pol Lozano, Pere Milla y ahora también Omar El Hilali están con cuatro amarillas. Es decir, a una sola de cumplir ciclo y perderse el siguiente. Y claro, el siguiente no es cualquiera: es el derbi del 3 de enero ante el FC Barcelona en el RCDE Stadium. Un duelo que todo perico tiene marcado con fuego en el calendario y que nadie quiere perderse… ni desde la grada ni desde el césped.
El caso Omar El Hilali: vuelta al once y cuarta amarilla
El último en sumarse a la lista de apercibidos ha sido Omar El Hilali. El lateral de la casa, que por cierto ayer se codeaba con la Realeza en L’Hospitalet, saludando a SM el Rey Felipe VI, ha recuperado la titularidad en los últimos partidos, y en el Coliseum cuajó otra actuación solvente. Pero en el minuto 27, Gil Manzano le mostró una cartulina por “derribar a un contrario en la disputa del balón, cortando así su avance, evitando un ataque prometedor”. Así lo puso el colegiado en el acta. Y con esa amarilla, ya son cuatro. Un aviso serio.
Lozano y Milla, también en riesgo para el Espanyol – Barça
Pol Lozano, que fue suplente contra el Getafe pero tuvo minutos, y Pere Milla, que volvió a jugar casi todo el encuentro, llevan semanas jugando con esa espada de Damocles sobre la cabeza.
Los dos son piezas importantes para Manolo y, salvo sorpresa, también apuntan al once en San Mamés. Así que, igual que Omar, tendrán que medir muy bien cada entrada, cada protesta, cada gesto. Porque una tarjeta puede cambiarlo todo.
Manolo no reserva: “He intentado sacar el mejor equipo para competir y ganar”
Después del partido en Getafe, Manolo González fue clarísimo al ser preguntado si había gestionado la alineación pensando en las tarjetas: “No. He sacado el equipo que consideraba por el tipo de partido. Queríamos un jugador en el medio como Edu, capaz de lanzar pases a la espalda, y por eso ha jugado Edu y no Pol. Queríamos jugar con los dos puntas y por eso no ha jugado Pol. Igual que los jugadores de banda; Jofre es el que mejor va al espacio y por eso ha jugado él. No he mirado el tema de las tarjetas; he intentado sacar el mejor equipo para competir y ganar. Si miras eso, nos queda otro partido antes del derbi y puede pasar lo que sea. Has de mirar ganar hoy y mañana será lo que toque”.
Un derbi en el horizonte… pero San Mamés es lo primero
El mensaje del técnico es nítido: no se va a reservar a nadie por miedo a una sanción. En esta Primera división tan apretada, cada punto vale oro y el partido ante el Athletic, aunque no tenga el foco mediático del derbi, vale lo mismo. Aun así, nadie puede negar que el Barça se juega distinto. La afición lo siente, los jugadores también. Y si alguno cae en San Mamés… será una baja muy dolorosa para el 3 de enero.