El nuevo descenso del Espanyol, el sexto de la historia y el segundo de la era Chen Yansheng, parece confirmar la crisis de un modelo y tras perder la categoría, el club blanquiazul tendrá que afrontar la temporada más difícil, tanto en términos deportivos como económicos, de la era Chen Yansheng. Como consecuencia del descenso los derechos televisivos caerán de los 50 millones previstos por este curso a los menos de 10,6 que recibió la temporada 2020-21, la última vez que fue a Segunda (y con el agravante que CVC se llevará un 10,95%). Además, la compensación por el descenso que hace tres años fue de 30 millones esta vez será de unos 17, a lo que hay que sumar la lógica caída del negocio comercial y los ingresos por abonos. Recordemos que Rastar Group, empresa propietaria del 99 por ciento del capital social del Espanyol y presidida por el propio Chen Yansheng, informó recientemente a la bolsa de Shenzhen de los riesgos económicosque provoca el descenso del club blanquiazul a Segunda división. Del mismo modo, Rastar reconoció que en caso de no regresar de inmediato a Primera, la situación podría ser delicada. Además, señaló que una hipotética disminución del valor de sus futbolistas por el descenso a Segunda división y también una rebaja de la inversión en el club pueden afectar negativamente al «valor de marca» de la entidad. A ello hay que añadir que la inversión en fichajes hecha en enero elevará las pérdidas previstas por este ejercicio con lo que según avanzó hace unos días ‘Ara’ podría arrastrar unos números rojos de 50 millones de euros en los tres últimos cursos, cosa que limitará todavía más el margen salarial. El mismo medio explicaba que ante la imposibilidad que Chen Yansheng ejecute nuevas ampliaciones de capital éste tendría prevista una nueva vía de ingresos extraordinaria: encontrar un socio con dinero fuera de China que pueda hacerle un préstamo participativo en el Espanyol, algo que permitiría mejorar la liquidez de la empresa aunque se corre el riesgo de volver a endeudar el club a causa de unos intereses que podrían ser muy elevados según los resultados de la entidad.
A nivel deportivo, en el Espanyol hay que decidir qué hacer con Catoira y evitar una fuga de talentos en la plantilla
A nivel deportivo, el Espanyol habrá de afrontar la temporada en Segunda con menos recursos que en la anterior ocasión, con un presupuesto que como avanzó ‘La Grada’ rondará los 40 millones de euros, la mitad de la cifra actual aunque con todo será el más elevado de toda la categoría de plata. El club tendrá que hacer algunos recortes en personal deportivo y no deportivo, con lo que se deberá aplicar un plan laboral en diferentes departamentos de la entidad -para este miércoles habría previstas asambleas de trabajadores tanto en Cornellà como en Sant Adrià por la preocupación generada por la situación-. Bien sabido es que en lo que pertoca a la plantilla deportiva, hay tres jugadores del Espanyol que cuentan con una cláusula en su contrato que facilitaría su salida en calidad de cedidos durante el próximo mercado de verano, Joselu Mato, Sergi Darder y Leandro Cabrera. La mayoría de futbolistas del Espanyol acordaron con el club blanquiazul que, en caso de descenso, rebajarían su sueldo un 50% durante el primer curso del equipo en Segunda, cantidades que recuperarán en la temporada 2024-25, con la salvedad de que los citados tres jugadores están obligados a quedarse si la entidad se compromete a mantenerles el salario que perciben en la máxima categoría. Al delantero se le lleva vinculando desde hace semanas con el Real Madrid, aunque está por ver si la inesperada marcha de Benzema provoca o no un cambio de planes en los despachos del Bernabéu; pero si acaba saliendo, habrá que fichar un recambio de garantías y el gol se cotiza caro en el mercado. Por lo que respecta al centrocampista, se ha marcado un tiempo para decidir su futuro: ya hay equipos interesados como Villarreal y Sevilla, que podrían intentar quedárselo en propiedad o incluir una opción de compra en su cesión, y Valencia y Real Mallorca que estarían más por la labor de aprovechar la citada cláusula y acogerlo a préstamo. Garantizarse la continuidad de Darder habría de ser una de las prioridades del club, aunque la misma parece incompatible con la presencia de Domingo Catoira en la dirección deportiva; ya en su día, el de Artà reconoció en declaraciones al Twitch de Javier de Haro sentirse engañado con las promesas del técnico, algo que posteriormente refrendaría el mismo Joselu. A día de hoy, parece que los canales entre el vestuario y Catoira están rotos, algo que parece un impedimento total y absoluto para construir un proyecto de garantías cara a conseguir en ascenso por la vía rápida. A Chen se le ha trasladado esta situación, y en su mano está confirmar en el puesto a Catoira o bien proceder a una sustitución para la cual ya han sonado candidatos como Victor Orta y David Fernández.
