No cabe duda que uno de los aspectos que debe preocupar al Espanyol ante la visita del Atlético de Madrid es la presencia en el banquillo de Diego Simeone, uno de esos técnicos que no entiende de relajaciones y que siempre busca el triunfo de su equipo; y es que si alguien piensa que el hecho de que el Atlético haya acabado de lograr su clasificación para la próxima edición de la Champions League -la 11ª consecutiva con el argentino en el banquillo- más vale irlo olvidando. “El esfuerzo no se negocia; ni tolero el conformismo. La pasividad está alejada de mi”, es una de las frases del decálogo del “cholismo”, ese manual de vida que guía al de Buenos Aires.
El RCDE Stadium es uno de los escenarios que objetivamente peor se le da a Simeone, al menos por lo que atañe al índice de victorias
De todos modos, lo cierto es que hay algunas estadísticas de Simeone con el Espanyol que ayudan a mirar al partido con optimismo, teniendo en cuenta la necesidad imperiosa del conjunto de Luis García de ganar, o en el peor de los casos, puntuar. Y es que el RCDE Stadium es uno de los escenarios que objetivamente peor se le da a Simeone, al menos por lo que atañe al índice de victorias: el argentino sólo ha ganado en el 44% de sus nueve visitas al estadio perico en Liga -4 victorias, dos empates y tres derrotas-. Sólo en el Spotify Camp Nou (0%); La Cerámica y Santiago Bernabéu (30%); y el Ramón Sánchez Pizjuán (42%) el entrenador del Atlético tiene un porcentaje de victorias más bajo de entre todos los estadios con al menos 10 visitas ligueras. Lo malo de esta estadística: los colchoneros se han impuesto en tres de sus últimas visitas a feudo perico en Liga -el resto, un empate y dos victorias del Espanyol-, los mismos triunfos que en sus anteriores 12 encuentros fuera de casa ante el cuadro blanquiazul en la competición (3 victorias, cuatro empates y seis victorias pericas).